Durante los tres periodos presidenciales de ARENA y los dos del FMLN nunca se hizo nada a favor de legislar por el recurso hídrico.
Con 65 votos, la Asamblea Legislativa acordó aprobar la nueva Ley General del Recurso Hídrico, marco normativo que regulará el uso, manejo, cuido, preservación, y protección del agua en todas sus formas en El Salvador.
Durante todo el proceso la Asamblea Legislativa creó una comisión ad hoc para analizar la propuesta, y en 15 sesiones de trabajo pudieron consensuar la nueva normativa, en conjunto con instituciones públicas, empresas privadas, universidades, iglesias y organizaciones de la sociedad civil.
Los legisladores aseguraron que la nueva ley define como derecho humano el agua y el saneamiento, y obliga y faculta al Estado a garantizar el cumplimiento de los mismos.