El presidente Nayib Bukele anunció que, a pesar de las previsiones negativas de algunos sectores, el gobierno ha logrado reducir los precios de los alimentos en El Salvador mediante la implementación de medidas como los agromercados y la Central de Abastos. En un mensaje reciente, el mandatario destacó que, frente a las críticas de la oposición que afirmaban que era «imposible» bajar los precios debido a los altos costos internacionales, las acciones gubernamentales han tenido un impacto positivo en la economía.
«Dijeron que era imposible, que no podríamos bajar los precios de los alimentos; que, frente a los altos precios internacionales, las medidas del gobierno solo provocarían precios más altos y escasez. No los escuchamos y, 4 meses después, lo logramos: ¡DEFLACIÓN! Y aún falta», expresó Bukele.
A lo largo de los últimos meses, la administración de Bukele ha apostado por la implementación de los agromercados, espacios donde los productores locales pueden vender directamente a los consumidores, eliminando los intermediarios y reduciendo los costos. Esta iniciativa, junto con el fortalecimiento de la Central de Abastos, ha permitido estabilizar los precios y generar una deflación real, según el mandatario.
Este logro, que se alcanzó en solo cuatro meses, ha sido considerado un avance significativo para el gobierno, ya que ha desafiado las expectativas de los opositores que anticipaban un aumento en los precios debido a la inflación global y las tensiones en los mercados internacionales. Sin embargo, Bukele ha enfatizado que, a pesar de los resultados positivos, aún queda trabajo por hacer para continuar reduciendo el costo de los alimentos y mejorar el acceso de la población a productos más económicos.
Con este mensaje, el presidente refuerza su postura frente a las críticas y presenta los agromercados como una solución efectiva para enfrentar los altos precios en un contexto económico global desafiante.