Según ONU Turismo, El Salvador está viviendo una transformación significativa gracias a un plan de inversiones que supera los $7,500 millones. Estas inversiones han sido clave para la construcción de una infraestructura turística moderna, la mejora de la seguridad en todo el territorio y el impulso de la imagen internacional del país. A través de estos proyectos, el país se está posicionando como un destino atractivo tanto para turistas internacionales como para inversionistas, con un enfoque en la sostenibilidad y el desarrollo económico.
La agencia destacó que El Salvador, a través de estos esfuerzos, ha demostrado su capacidad para competir en el mercado turístico global. Las playas, la cultura vibrante, la historia, la gastronomía y la naturaleza única del país han sido factores clave que atraen a miles de turistas cada año. Además, el país ha logrado convertirse en un destino con gran potencial para el turismo de aventura, ecológico y cultural, una tendencia que continúa creciendo.
Una de las iniciativas más destacadas ha sido el impulso de Surf City, un destino turístico reconocido a nivel mundial por sus olas de clase mundial, lo que ha atraído a surfistas y turistas de diversas partes del mundo. Además, se han fortalecido destinos como La Ruta de Las Flores, una de las rutas más pintorescas del país, que ofrece una mezcla de cultura, naturaleza y aventura. El Cerro Verde, con su biodiversidad única, también ha sido objeto de esfuerzos para atraer a los amantes de la naturaleza y el ecoturismo.
El gobierno del presidente Bukele también ha estado trabajando en la creación de nuevas oportunidades de desarrollo turístico en áreas previamente marginadas. Estos esfuerzos no solo buscan beneficiar a las principales zonas turísticas, sino también diversificar las opciones disponibles para los visitantes, lo que permitirá un crecimiento equilibrado y la creación de empleo en diversas regiones del país.
ONU Turismo ha resaltado que la visión de El Salvador no solo está centrada en el aumento del número de turistas, sino también en la creación de un entorno seguro, accesible y sostenible para que los visitantes disfruten plenamente de la belleza y riqueza del país. En este sentido, la seguridad ha sido una prioridad para el gobierno, con el objetivo de garantizar que los turistas puedan explorar el país con confianza.
Con estas iniciativas, El Salvador no solo se posiciona como un destino turístico de clase mundial, sino que también se proyecta como un modelo de desarrollo turístico sostenible en América Central, con el potencial de atraer millones de turistas internacionales en los próximos años.