Desde hoy y durante cuatro semanas el país vuelve a un confinamiento casi idéntico al de marzo de 2020. Sólo un 50% de la población tiene la pauta completa de la vacuna.
Ante el peligroso avance del virus, el Ejecutivo ha decidido, a partir de este jueves y durante las próximas semanas, implantar de nuevo un confinamiento estricto, con toque de queda nocturno. Son las mayores restricciones adoptadas en el país desde el inicio de la pandemia, en marzo de 2020.
El cierre de la vida pública afectará todas las actividades culturales, sociales y reuniones públicas, así como encuentros entre personas de más de un hogar, según acordó el Consejo de Ministros, pese a las divergencias surgidas entre algunos de sus miembros.
El toque de queda nocturno imperará desde las 20.00 a las 05.00 de la mañana, con la única excepción en la movilidad de las personas que se desplacen a su puesto de trabajo o regresen de él, así como quienes precisen atención médica o deban cuidar a un familiar fuera de su hogar.
Apenas un 50 % de la población tiene la pauta completa de la vacuna, lo que sitúa a la república báltica por debajo de la media de la Unión Europea (UE). El ministro de Sanidad, Daniels Pavluts, afirmó en una comparecencia ante los medios que había señales esperanzadoras, ya que el ritmo de las vacunas se había duplicado en los últimos días.
La decisión de adoptada por Letonia sigue a la reunión del Gobierno y el equipo de crisis del pasado viernes, que avanzó la adopción de medidas estrictas. La cifra de nuevos positivos de ayer, miércoles, era de 2.599 personas, mientras que en las últimas 24 horas se reportaron 24 víctimas mortales relacionadas con la pandemia.