El todavía dueño del Chelsea, Roman Abramovich, sufre síntomas que corresponden con un posible envenenamiento, según informa el Wall Street Journal, después de una reunión en Kiev a principios de este mes con las negociaciones de paz como trasfondo.
«Después de la reunión en la capital ucraniana, Abramovich, que ha viajado entre Moscú, Lviv y otros lugares de negociación, así como al menos dos miembros de alto nivel del equipo ucraniano, desarrollaron síntomas que incluían ojos rojos, lagrimeo constante y doloroso y descamación de piel en sus caras y manos«, informa el WSJ.
Según los diversos reportes, las vidas de Abramovich no corre peligro y su condición ha mejorado en los últimos días.