Este día se celebro una conferencia de prensa por parte de la Mesa de Protección a Periodistas de la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES), quienes criticaron fuertemente las nuevas reformas aprobadas a la «Ley de Proscripción de Pandillas y al Código Penal» tildándolas de censura.

Según los detalles que expuso el jefe de redacción de Revista Factum, César Fagoaga, estas reformas son una clara «violación» al oficio del periodismo en El Salvador. Esta conferencia se produce a raíz de las reformas hechas por la Asamblea Legislativa al artículo 345-C del Código Penal, con el fin de que se sancione la elaboración y reproducción ilegal de mensajes, señales, denominaciones o propaganda alusiva a pandillas.

«Esperamos que las organizaciones internacionales se pronuncien ante esto…  queremos que respeten el trabajo periodístico, no podemos pensar que al no mencionar (a las pandillas) van a desaparecer. Es nuestro trabajo hablar de las pandillas», dijo Fagoaga.

Las reformas al artículo hechas por los diputados de la Asamblea Legislativa, dicta que quienes elaboren, participen o faciliten la ejecución de «textos, pinturas, diseños, dibujos, grafitis y cualquier otra forma de expresión visual en inmuebles públicos y privados», donde transmitan mensajes explícitos e implícitos que hagan alusión a las maras o pandillas, con la finalidad de establecer un control territorial o amenazar a la población, serán sancionados con una pena de diez a quince años de prisión.

Así mismo, las enmiendas contemplan y establecen la misma sanción para quienes hagan uso de los medios de comunicación digital y tradicional, «para reproducir mensajes o comunicados originados o presuntamente originados por los grupos criminales», que provoquen pánico en la población salvadoreña.

Actualmente la lucha contra estos grupos terroristas de la MS y 18 continúan, diversos organismos de derechos humanos internacional «buscan incidir» sobre las decisiones gubernamentales implementadas, pero sin efecto y criticados por la misma población, por buscar abogar por los derechos de los pandilleros terroristas en vez la población común, en contra parte el pueblo salvadoreño respalda lo realizado por el Presidente Nayib Bukele, implementando diversas medidas para eliminar de una vez por todas este flagelo que por años han destruido la vida de los ciudadanos y el país.