La legislación de Oklahoma prohíbe todos los abortos después del momento de la concepción, excepto en casos de violación, incesto o para salvar la vida de la madre.
La legislación también permite a ciudadanos particulares demandar por hasta 10.000 dólares a quien proporcione servicios de interrupción del embarazo o a quien ayude a una mujer a abortar.
El Centro de Derechos Reproductivos anunció que, junto con la Federación de la Planificación Familiar de EE.UU., presentará una demanda para bloquear la ley.
Con información de Agencia EFE.