Después de conocer las sanciones de la comisión disciplinaria de la Federación Salvadoreña de Fútbol hacia el Alianza F.C, los salvadoreños han tachado las medidas como «flojas y sin peso» luego de la tragedia ocurrida el sábado, en el Cuscatlán, que ocasionó 12 fallecidos.

Los salvadoreños piden que capturen a los verdaderos responsables de la tragedia ocurrida en el fútbol cuscatleco y los ciudadanos opinan que las medidas dadas por la comisión disciplinaria solo son cosméticas a los hechos y que los verdaderos culpables no han sido ni siquiera mencionados por dicha comisión impuesta por FIFA.

Las medidas hasta cierto punto afectarán a los jugadores y cuerpo técnico, algo que no es bien visto por los salvadoreños, añadiendo que ellos no tuvieron la culpa de la organización y la venta de boletería.

El organismo disciplinario de la FESFUT condenó a los albos a jugar sin público por un año, además de ser descalificado de forma directa del actual campeonato con un global de 3 por 0 a favor de C.D FAS quien pasa a la siguiente ronda y por último la dirigencia de Alianza deberá pagar una multa de $30,000.

Los salvadoreños exigen además indemnizar a las víctimas del evento deportivo, para retribuir la pérdida de las vidas de sus seres queridos que dejan 12 hogares al borde de la desesperanza y tristeza.

Hasta el momento, el presidente del Comité Regularizador de la FESFUT, Humberto Saenz es considerado por los salvadoreños como un mercenario deportivo, por las declaraciones que hizo en medio de la tragedia, argumentando que la vida sigue y el fútbol debe continuar, mientras doce familias viven el calvario de la muerte.