Las supuestas fosas están situadas dentro del espacio de la escuela de la Misión de Saint Joseph, un internado para niños indígenas.
Una comunidad indígena en Canadá identificó 93 «potenciales» tumbas en una antigua escuela residencial. Esto ocurre apenas meses después de que el hallazgo de los restos de cientos de niños en internados sacudiera el país.
La nación originaria William Lake First Nation informó que una investigación geofísica reveló «93 reflejos» con características «indicativas de posibles entierros humanos» en el antiguo internado para niños indígenas St. Joseph’s Mission, en la Columbia Británica, una institución que dejó de funcionar hace años.
El hallazgo
Los investigadores «analizaron aproximadamente 14 hectáreas de las 480 del lugar», que se ubica a unos 300 kilómetros al norte de Kamloops, donde se hallaron unos 215 restos en mayo del 2021.
El jefe de la nación originaria, Willie Sellars, indicó que se necesitaría una excavación para confirmar la presencia de restos humanos y que aún falta mucho trabajo por hacer para llegar a una determinación final.
Sellars indicó, también, que las historias contadas por los supervivientes sugieren que «muchos» de los niños que asistieron a la escuela siguen sin aparecer.
«Sus cuerpos fueron arrojados al río, dejados en el fondo de los lagos, arrojados como basura en las incineradoras», comentó. «Son esos niños y familias lo que más nos duele», detalló.
Sellars dijo que los sobrevivientes de Williams Lake y de casi una decena de naciones originarias aledañas recibirán apoyo para hacer frente a los descubrimientos.
Desde mayo, más de 1.000 tumbas anónimas han sido encontradas cerca de las antiguas «escuelas residenciales para indígenas» gestionadas por grupos religiosos, lo que ha puesto luz a un oscuro capítulo de la historia de Canadá y a su política de asimilación forzada.
Ocurre que desde el siglo XIX hasta la década de 1970, más de 150.000 niños indígenas en Canadá fueron separados de sus familias y obligados a asistir a escuelas cristianas financiadas por el Estado como parte de una labor por incorporarlos a la sociedad canadiense.
En este caso, miles de niños indígenas asistieron a la St. Joseph’s Mission entre 1886 y 1981, según la comunidad William Lake. A principios de enero, el gobierno canadiense anunció la financiación con 1,9 millones de dólares canadienses (USD 1,5 millones) para investigar el lugar.
Una dolorosa realidad
El gobierno de Canadá reconoció que los abusos físicos y sexuales eran generalizados en estas escuelas, y que los estudiantes eran golpeados por hablar en sus lenguas nativas.
Líderes indígenas sostuvieron que ese legado de abusos y aislamiento fue el que provocó las tasas epidémicas de alcoholismo y drogadicción en las reservas.
El primer ministro Justin Trudeau dijo que este posible hallazgo «saca a la superficie muchas emociones angustiantes».
Hay numerosas investigaciones desplegadas en el país sobre las antiguas escuelas residenciales, donde se estima que desaparecieron entre 4.000 y 6.000 niños, según las autoridades.
Con información de agencias