Tras el reconocimiento de la vestimenta que portaba el día de su desaparición, Mario Escobar, padre de Debanhi, denunció que hubo irregularidades en la búsqueda; sin embargo, la Fiscalía de Nuevo León, en México, aún no confirma la identidad.
El señor Mario Escobar está seguro de que el cuerpo que se encontró en la cisterna abandonada a metros del motel Nueva Castilla, en el municipio de Escobedo, Nuevo León, es el Debanhi Susana Escobar.
«Por creer en la Fiscalía pido perdón a mi familia, fueron muchos días y la Fiscalía no hizo su trabajo correctamente”, declaró Mario Escobar tras reconocer la ropa y calzado que vestía su hija el pasado 9 de abril, cuando desapareció.
“El corazón de mi esposa y el mío pedía, exigía. Mi hija está muerta y no sé qué hacer, estoy molesto porque me equivoqué, creí en la Fiscalía, nunca me pasaron los tomos, les pedía copias, es mi derecho como víctima, nunca los tuve en mi poder. Ellos no hicieron su trabajo”, continuó durante la conferencia de prensa que dio durante la madrugada de este viernes.
Afectado por el hallazgo, Mario Escobar denunció que las autoridades no le entregaron las copias correspondientes al expediente del caso de su hija, además de no permitirle el acceso al área para ver el trabajo de las autoridades.
“Exijo justicia, que se aclare por qué desapareció Debanhi, en qué momento supieron y no nos informaron. Al llegar aquí no nos dieron espacio que por derecho tenemos de estar observando en un área, a unos metros que fue aquí atrás de esta barda. No nos dejan entrar, no nos pasaron información tal vez porque no era su hija. Pónganse en el papel de nosotros y van a sentir lo que estamos sintiendo”, expresó.
Entre lágrimas dijo: “Perdónenme, es todo lo que tengo que decir”.