Jonathan Moral Guerrero, un empresario español viajó hasta El Salvador para confirmar que el café salvadoreño es uno de los mejores del mundo.
El viaje del español estuvo centrado en la finca «El Divisadero» en El Salvador, donde tenia objetivos, el primero era impartir una conferencia Internacional sobre la siembra y el cultivo de los granos de café y la otra fue hacer catación de café de la finca que visito en la zona de Apaneca, donde salio impresionado de la calidad del grano salvadoreño.
El Salvador tiene su historia con el grano de oro por excelencia, el país tiene diferentes tipos de plantas de café de alta categoría, incluso grano de exportación directa a otros países.